Poco se conoce sobre la postura oficial del escrito que circula a través de Whatsapp y las diferentes redes sociales sobre el llamado “Futoji no henko” que supone medidas que se llevan a cabo en Japón para educar “ciudadanos del mundo” y que pone en burla el comportamiento, los intereses y la educación de los jóvenes occidentales.
La cadena que circula y sobre la cual ya probablemente has escuchado, básicamente dice que Japón pone a prueba un revolucionario plan piloto: “Futoji no henko” que busca que los niños de edad escolar entiendan y acepten diferentes culturas para tener horizontes globales. El programa de 12 años de duración no exige tareas y no incluye materias electivas. Los niños solo estudiarán 5 materias: Aritmética de Negocios, Lectura, Civismo, Computación, Idiomas. ¿Qué resultados busca? Jóvenes que a los 18 años hablan 4 idiomas, conocen 4 culturas, 4 alfabetos; Expertos en uso de sus computadoras y celulares como herramientas de trabajo; Leen 52 libros cada año; Respetan la ley, la ecología y la convivencia y manejan la aritmética de negocios y finanzas.
Investigando un poco más sobre el tema, decidimos navegar en Internet y tratar de conseguir información oficial, pero lamentablemente no conseguimos documentación que certifique la cadena que está circulando ya hace un buen tiempo.
El día de hoy no buscamos ahondar en la realidad o falsedad del escrito, pero si quisiéramos plantearlo como una hipótesis, donde, -tal y como lo hace la cadena que circula- pone en entredicho la educación y estilo de vida que tienen nuestros hijos. La cadena nos dice “¡Contra ellos van a competir nuestros hijos! ¿Y quienes son nuestros hijos?”. Y aquí es a dónde queremos llegar. Como asesores educativos nos damos cuenta de varios aspectos importantes:
El padre latinoamericano efectivamente se interesa por la calidad de la educación que reciben sus hijos y si buscan formar ciudadanos del mundo. Cada vez más son las familias latinoamericanas que buscan complementar la formación académica de sus hijos ofreciéndoles programas de estudio en el extranjero para que puedan aprender y perfeccionar otros idiomas, conocer otras culturas y tener experiencias inolvidables.
Los jóvenes a nivel mundial se interesan por las mismas cosas y ciertamente ocupan gran parte del tiempo en Internet. Más que una crítica a su estilo de vida debemos tomarlo como una reflexión para ofrecerles alternativas más educativas y que les aporten beneficios futuros.
